Reproducimos una columna de Manuel Vicent sobre la mística como medicina ante el naufragio
social y la crispación política. En esta época turbulenta y confusa donde
proliferan múltiples refugios en la interioridad o en la religiosidad
evanescente, el cuidado yoísta, la meditación celestial, el mindfulness, etc.)
Manuel Vicent añade (El
País, 11-11-2018) una “mística pagana de salvación” Como un
divertimento no exento de hondura existencial y suculenta ironía.
Vivimos un tiempo de cambios profundos. Las recientes teorías del conocimiento, el espectacular avance de la ciencia y de la tecnología, el mestizaje de culturas y los graves problemas de la desigualdad y del deteriore del planeta nos adentran en un nuevo paradigma o marco cultural desde el que interpretar y transformar el mundo. Este blog pretende ser una herramienta de reflexión y creatividad en el ámbito de la espiritualidad y de la praxis. ¿Nos acompañáis?
Efectivamente, creo que la mística, nos sube por encima de la basura moral, y nos hace vivir la vida con intensidad inusitada.
ResponderEliminarLa mística no es "celestial" tal como yo lo veo. Nos sitúa exactamente en lo que es la Realidad. Pero realidad de la buena, la firme, desde la que podemos actuar con certeza.
Si quieres ser feliz y de paso transformar el mundo. Medita...